Las tareas se realizan con maquinaria municipal en el predio dispuesto con ese fin, ubicado en el sector periférico de Rawson y que tiene una casilla de seguridad durante las 24 horas.
Allí, en cumplimiento de la legislación correspondiente, y tras el pago de un canon, las empresas a través de camiones vuelcan los desechos de los langostinos que posteriormente son tapados con la propia tierra del lugar, para evitar su descomposición al aire libre.
De acuerdo con las estimaciones municipales, más de 10 camiones por día concurren al predio para depositar los residuos pesqueros en las cavas, que son construidas de manera permanente por maquinaria y personal municipal.
Gestiones
Cabe recordar que en agosto del año pasado, la intendenta Rossana Artero convocó a representantes de las empresas pesqueras para coordinar una solución a los residuos de la actividad.
Como consecuencia de esa gestión se dispuso un puesto de control durante las 24 horas, con el objetivo de supervisar la descarga de los residuos. Además se acordó el pago de un canon al municipio a través de chequeras que retiran periódicamente las empresas.
De manera paralela, la Municipalidad trabaja en alternativas que brinden una respuesta definitiva, entre las cuales se encuentra la utilización de los desechos de langostinos como fertilizante. Para ello se realizan pruebas en el Vivero Municipal, en un trabajo conjunto con la Secretaría de Pesca de la Provincia.