Primero, el Gobierno le quitó al Banco Hipotecario la exclusividad del negocio del Procrear, el plan oficial para facilitar el acceso a la vivienda propia de los sectores medios de la población, y lo abrió a todos los bancos del sistema. Ahora, busca renegociar el contrato con la entidad financiera que gestiona el grupo IRSA, que es la fiduciaria del plan y la responsable de la gestión de los desarrollos urbanísticos que se idearon con el Procrear.
Mediante un decreto publicado ayer en el Boletín Oficial, se formalizó el traspaso de la presidencia del comité ejecutivo del Procrear al Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda. En la práctica, ya hace un tiempo estaba a cargo del subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Nación, Iván Kerr, que responde al ministro Rogelio Frigerio . Pero, además, se estableció que «corresponde prever» que ese ministerio «pueda sustituir al fiduciario, de considerarlo pertinente, y aprobar y suscribir el nuevo contrato de fideicomiso, o bien modificar el vigente». Lo que, en otras palabras, allana el camino legal para la renegociación con el Hipotecario.
«Hay un intención del Gobierno de tomar más control sobre el dinero que administra el banco a través del fideicomiso de Procrear», confirmó a LA NACION una fuente al tanto de las negociaciones. «Hay un negocio con dinero del Estado que no es en beneficio del Estado», deslizó.
La idea sería modificar el esquema de comisiones que cobra el banco, que tiene un triple rol en el plan Procrear: como fiduciario, responsable de gestionar el otorgamiento de los créditos y controlar la construcción de los desarrollos urbanísticos. El cambio apunta sobre todo a conseguir que las comisiones, en lugar de ser un costo fijo mensual, estén atadas al resultado, lo que aplicaría sobre todo ahora a su función como auditor de los desarrollos urbanísticos.
Como parte del Procrear -plan que comenzó con el kirchnerismo-, hay 79 desarrollos, por un total de 23.000 viviendas, de las cuales hasta ahora se entregaron cerca de 2000. La idea del Ministerio del Interior es que este año se entreguen al menos otras 4000.
Fuente:La Nación