La única reserva del pingüino de Magallanes del país, se encuentra en Punta Tombo, una reserva natural que además de estar en plena temporada, en las últimas horas fue violentada por la mano del hombre, un propietario de campo, que sin la debida autorización de la secretaría de Ambiente; electrificó el cerco perimetral del terreno y con la maquinaria que utilizó para realizar el camino, mató a unos 140 pichones. «Una nueva generación de pingüinos murió», dijo la fiscal Florencia Gómez, en diálogo con FM Tropical.
Sobre el triste y repudiarte hecho denunciado ayer por autoridades provinciales y Áreas Protegidas, la fiscal Florencia Gómez explicó que en dicha denuncia se puso en conocimiento que «había uno de los dueños del campo, lindante a la reserva de Punta Tombo, que había realizado un camino, y al realizar ese camino con una maquinaria de alto porte, aplastó y sepultó todos los nidos de pichones de pingüino de Magallanes. Al hacer esto más de 140 especies quedaron aplastadas y sepultadas sobre sus nidos, y los adultos, tanto machos como hembras que habían ido al agua buscar comida, quedaron electrificados; porque no solamente se realizó ese camino sino que se cerró con un alambre eléctrico toda la zona hasta la costa. Entonces los machos y las hembras adultas cuando regresaron, y tenían sepultados a sus pichones, quedaron electrificados», explicó la fiscal brindando detalles de lo acontecido.
«Esto ha generado un impacto ambiental enorme», afirmó la fiscal aclarando que los datos brindados son los que se tomaron de un primer acercamiento al campo, pero con la llegada de especialistas se va a lograr profundizar más en las consecuencias y dar con el numero real de pingüinos muertos.
La culpabilidad
Sobre el dueño del campo y la investigación, la funcionaria judicial señaló que «ahora se está realizando un allanamiento y pedido de secuestro del alambre perimetral, entre otros elementos. Allí trabaja en conjunto la comisión de Policía Montada de Rawson, la Brigada de Investigaciones, criminalística y personal de Ministerio de Ambiente, Flora y Fauna.
Consultada sobre la responsabilidad y el delito que recae sobre el propietario del campo, un hombre oriundo de la capital, la fiscal dijo que provisoriamente es la Ley de Maltrato y crueldad animal, ley 14.346 , «digo provisoriamente porque aún está en investigación, pero la gravedad recae en que es un área protegida» , finalizó la fiscal mencionando que la perdida puede ser aún más grave, porque lo más triste de todo es que «hay pingüinos que están buscando a sus crías y siguen pasando el alambrado» .